Por: Hernán Durango.
- Si quieres conocer al pueblo colombiano, súbete en un bus de servicio urbano, decían Los Amerindios, en una de las canciones del fenomenal grupo musical setentero de nuestro país.
Hoy se puede afirmar con Los Amerindios que si se quiere conocer cuál es el personaje más detestable de la capital, con seguridad nos contestarían que es el alcalde Enrique Peñalosa.
No es un capricho, no es una necedad. Si lo quieren evidenciar pueden seguir la recomendación de Los Amerindios y subir a un taxi e indagar al conductor sobre el alcalde del Distrito Capital y éste se despachará con sus explicaciones profundas contra el desgastado mandatario.
Y no es para menos. La ciudadanía ha visto como el sr. Enrique Peñalosa y su bancada de concejales neoliberales se dedican a vender uno de los bienes de los bogotanos como lo es la Empresa de Telecomunicaciones ETB, anuncian privatizaciones en hospitales, educación, aumento en cobro de impuestos, tarifas de servicios públicos, instalación de peajes urbanos, construcción de edificios en la Reserva Forestal Thomas van der Hammen y en los cerros de la ciudad. Por ello, un grupo de jóvenes del Distrito Capital junto a diferentes organizaciones sociales y expresiones políticas lanzaron la propuesta novedosa de realizar una “Estampida” el jueves 9 de junio desde el centro de Bogotá hasta la calle 90 por la carrera Séptima, para ir a los estratos medios y altos y exponerles la propuesta de iniciación de un fuerte movimiento para revocar al alcalde Enrique Peñalosa.
Juan Valbuena, dirigente de la Juventud Comunista JUCO e integrante del Comité por la revocatoria de Peñalosa, sostiene que “La Estampida realizada con éxito es una iniciativa que nace de la inconformidad generalizada de la población con motivo en las políticas de corte neoliberal de Peñalosa que afectan los derechos de la gente y en especial de las nuevas generaciones al tocarle derechos como las libertades democráticas por la represión policial del ESMAD que deja un joven asesinado, Miguel Ángel Barbosa, estudiante de la Universidad Distrital; pero también al ver que el derecho a la educación se afecta por la venta de la ETB y la financiación de la Universidad Distrital y los colegios de la ETB; entre otros temas que se pueden mencionar”.
Valbuena destaca que “La Estampida” del jueves 9 de junio por la Séptima hacia el norte de la ciudad llamó poderosamente la atención de muchas personas.
“Por la masiva participación juvenil y el respaldo de amplios sectores organizados de la sociedad, por la alegría desbordante, las energías, la creatividad. La movilización fue una demostración de la indignación de amplios sectores de Bogotá que van por la revocatoria del sr. Enrique Peñalosa. Esto nos permite expresar que nosotros en el comité coordinador del movimiento ciudadano por la revocatoria no pensamos parar en los próximos meses y vamos es por el paro cívico en las 20 localidades para derrotar sus políticas privatizadoras incluías en su Plan Distrital de Desarrollo contra los intereses de la ciudad”, indica Juan Valbuena.
Se puede aseverar que esta jornada de “La estampida”, es la manifestación que da inicio a la campaña ciudadana para sacar a Enrique Peñalosa de la Alcaldía de Bogotá. El proceso revocatorio requiere un comité promotor que deberá recolectar y presentar en enero de 2017 un mínimo 271.818 firmas, equivalentes al 30 % de la votación que obtuvo el alcalde. Todos y todas avivamos la esperanza y el compromiso con la ciudad para proyectarla como una Bogotá para la paz con justicia social que Colombia clama y construye cada día. Peñalosa y sus políticas van en contravía de estos anhelos.
Foto: “la estampida”
Fotos: Diario El Espectador
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