Hacemos fuerza por la salud de Máximo Jiménez, cantautor popular-revolucionario colombiano

Montería. Por: Hernán Durango 

En las últimas horas se conoció la información sobre el delicado estado de salud del  cantautor popular-revolucionario del departamento de Córdoba, Máximo Jiménez, quien desde hace tres días se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos UCI de la clínica Zayma de la ciudad de Montería tras una recaída en su enfermedad cerebral, por lo que permanece  bajo el cuidado de los galenos.

Según el informe del periodista Roberto Castilla Arroyo, director de la Revista Expectativa, el juglar  de la música sinuana y sabanera Máximo Jiménez, quien venía ejerciendo su música interpretada con acordeón  bajo un riguroso tratamiento médico, ya que hace unos 10 años estando asilado en Austria sufrió una trombosis en ese país fue atendido por los especialista y por milagro le salvaron su vida.

Máximo Jiménez al volver a su país, se residenció en uno de los barrios del sur de Montería, donde en ningún momento dejó de tocar su acordeón y de vez en cuando animar reuniones familiares hacer sus presentaciones en público interpretando temas como “El Indio Sinuano” de David Sánchez Juliao, “La Campana descompuesta” de Felipe Negrete, “El Burro leñero” y muchas más canciones.

“Una de sus últimas presentaciones en público fue el pasado 15 de Octubre en la celebración del Compositor y autor colombiano sede Montería con sus colegas afiliados a Sayco, ahí se le vio alegre y complaciente con todos tocando de verdad su acordeón”, indica el comunicador Roberto Castilla.

Diversas personalidades y voceros de sectores sociales, sindicales, campesinos, intelectuales , artistas y políticos de la región del caribe colombiano se han solidarizado con el artista y hacen votos por su pronta recuperación.

“Hagamos oraciones por su salud para volverlo ver tocar su acordeón e interpretar sus canciones Dios lo bendiga en su lecho de enfermo” escribe el director de la Revista Expectativa.

Por su parte, Israel Ordoñez Olaya, cantante y director del grupo musical La Fuerza Vallenata, desde Bogotá escribe en las redes sociales “Hacemos votos por su recuperación de Máximo Jiménez para que siga extendiendo su mensaje social”.

German Silva, escritor y analista político-cultural destaca del artista en una nota biográfica en  el portal  vallenato.com  ( LEA:http://www.elvallenato.com/biografia/288/Maximo-Jimenez.htm ) que Máximo Jiménez  creció en una familia campesina, saboreando desde temprana edad, los duros trabajos del agro para sustentar a la familia. Pero allí también la música era una parte central de la vida, pues había una legendaria descendencia de acordeoneros. El abuelo le enseñó al papá y luego Máximo aprendió de él. Cosa que no es rara en las provincias costeras de Colombia. La Música del Valle de Upar, hunde sus raíces en generaciones sucesivas, que se contaban, desde sus creencias religiosas, sus penas y alegrías y que, luego, componían en coplas y paseos para criticar, burlarse y satirizar a sus paisanos, incluyendo a falsos politiqueros y presidentes.

Pero el ingenio de Máximo, “El Indio Sinuano”, no se quedó en la música. Fue también ordeñador en los corrales, jinete de potros bravíos en la finca, artesano y carpintero.

En importante trabajo del periodista del municipio de Chinú, Córdoba, Jorge Otero Martínez,  (LEA:  http://lavozdelsinu.blogspot.com.co/2009/07/el-indio-sinuano-que-se-volvio-una.html) afirma  de Máximo Jiménez: “Es el juglar cordobés más importante de la canción protesta. Por eso le colocaron el rótulo de guerrillero y hoy sobrevive en el exilio gracias a sus canciones y a sus deliciosos tamales o pasteles de masa con pollo y cerdo”.

Sin lugar a dudas, es Máximo Jiménez, uno de los más grandes exponentes de la música popular y luchador revolucionario de varias décadas en esta parte del caribe colombiano, quien animó con sus interpretaciones fiestas y encuentros en una región martirizada por el terror paramilitar y en donde oligarcas, terratenientes, mafiosos, corruptos, politiqueros en unas macabra alianza impusieron el silencio y el miedo. Hoy, que el cantautor ha vuelto a la tierra que lo vio nacer y lo forjó, expresamos alegría por su regreso  para estar con sus amistades y familiares y  hacemos fuerzas para que se estabilice su estado de salud.

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