Por: H. Durango
La combativa protesta de los sindicatos argentinos realizada este martes 29 de diciembre fue violentamente reprimida por las autoridades. Los trabajadores argentinos llamaron a la realización de un paro general de protesta para exigir la estabilidad laboral de los empleados de la administración pública. Convocados por la Asociación de Trabajadores del Estado argentino (ATE) se adelantaron movilizaciones en defensa de sus puestos laborales, ante las pretensiones del gobierno de Mauricio Macri de revisar las contrataciones actuales con miras a posibles despidos masivos.
Los trabajadores bloquearon el acceso a la autopista del aeropuerto internacional de Ezeiza y la gendarmería respondió con balas de goma y gases. La movilización tenía como destino una concentración frente a la sede del Ministerio del Trabajo, en Buenos Aires. Cuando fue atacada por los policías y carros lanza agua.
Además de la estabilidad laboral de los empleados de la administración pública, los funcionarios reclaman la reanudación de negociaciones para concretar un nuevo contrato laboral, informó la agencia Prensa Latina.
Asimismo, solicitarán el pago de la bonificación de fin de año por el monto de 5.000 pesos, informó.
Hugo Godoy, secretario general de la ATE, expresó: "Ante la ausencia de respuestas oficiales, nuestro sindicato estará en permanente estado de alerta ante cualquier intento de despedir a trabajadores en enero y, si ello sucediese, será respondido con más movilizaciones".
La alerta en los trabajadores públicos surgió luego que el ministro de Modernización, Andrés Ibarra, anunciara el miércoles pasado la revisión de 64.000 contrataciones y concursos otorgados en los últimos tres años.
La administración Macri ha señalado que existe un aproximado a 24.000 contratos de más dentro de este sector en todo el país, por lo cual se ha ordenado la mencionada revisión.
"Sufrimos una represión brutal. Ayer (lunes) nos habían dicho que podíamos seguir con el corte si dejábamos dos carriles liberados y hoy vinieron y nos dieron cinco minutos para liberar la autopista por orden de Mauricio Macri. Tenemos entre 10 y 12 heridos", declaró a la prensa Cristian Villalba, delegado de los trabajadores.
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